Makled no quiere callar

Todo un manto de silencio hay en la Asamblea Nacional frente a las acusaciones de Walid Makled, preso en Colombia y acusado por narcotráfico. El empresario insiste en haber pagado un millón de dólares mensual a funcionarios gubernamentales. Diputados no descartan abrir una investigación pero nadie toma la iniciativa

"Aquí se ha prendido un ventilador que pretende salpicar a todo el mundo", este fue uno de los señalamientos hechos por Maria Alejandra Ávila, presidenta de la subcomisión de Drogas de la Asamblea Nacional ante las declaraciones de Walid Makled.

Makled es un empresario de origen libanés que fue detenido por el gobierno de Colombia ante las acusaciones de Estados Unidos y Venezuela, países que lo señalan como un gran distribuidor de estupefacientes.

El acusado se defiende diciendo que sus inversiones son totalmente legales, pero lo más significativo del testimonio es que acusa a personalidades del Gobierno Nacional venezolano como Luis Felipe Acosta Cárlez (ex gobernador de Carabobo) y al general Néstor Reverol (actual Presidente de la Organización Nacional Antidrogas), así como a cinco diputados de la plantilla de la actual AN y otros tantos ministros de los que se desconoce el nombre.

En días pasados, Acosta Cárlez se defendió de los señalamientos hechos con un afrase: "Como dicen aquí en el llano, eso es pataleo de ahogado", mientras que el presidente de la ONA ha mantenido silencio total ante el tema, aún cuando es su responsabilidad responder en materia de estupefacientes.

Por su parte, María Alejandra Ávila sostiene que dentro del Parlamento no se tiene previsto abrir una investigación pues hay canales regulares que se deben respetar. Aunque personalmente es partidaria de realizar una investigación porque no conoce la veracidad de las acusaciones "que diga los nombres y muestre las pruebas y los documentos que dice tener, si no ha dicho los nombres sería hacer conjeturas".

LA CULPA DEL IMPERIO

Tulio Jiménez, Presidente de la Comisión de Política interior señaló en días pasados que el parlamento no se negaría a hacer una investigación, incluso si hay diputados de la bancada oficialista involucrados.

Sin embargo parece que no se le ha dado la seriedad pertinente al caso, aunque Ávila sostiene que "el poder legislativo tiene unas limitaciones y para eso está lo que establece la Ley Orgánica de Drogas".

Para la presidenta de la sub comisión de drogas las declaraciones de Makled responden a algún interés que estaría conectado con su extradición. Asimismo, señaló que no tiene conocimiento si el Gobierno de Chávez tiene intenciones de solicitar que el empresario sea entregado a las autoridades venezolanas, porque es competencia directa del Ejecutivo Nacional.

"Este parece un plan diseñado desde el equipo de gobierno de Estados Unidos y su política en contra de Venezuela, donde han dicho que es un Estado narco-compla- ciente y que no hace una verdadera política en materia de droga, cuando podemos decir que aquí se han incautado más de 56 toneladas de droga", dijo la diputada.

EL CONTRAPUNTEO

María Alejandra Ávila destacó que las investigaciones comenzaron cinco meses antes de la captura de los hermanos Makled, cuando la seguridad de varias entidades bancarias encendieron las alarmas por las transacciones y movimientos en las cuentas del empresario libanés. En sus declaraciones Walid Mackled señaló que colaboró con 2 millones de dólares para la campaña a favor del Sí en el referendo de 2007. Mientras que del lado del gobierno lo acusan de que transportaba estupefacientes en camiones con el logo de PDVSA falsificado. "Si hay pruebas verdaderamente vinculantes de que hay diputados involucrados, se activarían los organismos competentes y dentro de la Asamblea aplicaríamos el Reglamento de Interior y Debates", dijo Ávila.

Aunque insiste en que prefiere mantener una reunión con Tareck El Aissami y Néstor Reverol de la ONA para revisar exhaustivamente las declaraciones de Walid Makled antes de dar un paso.

FACILIDADES DEL GOBIERNO

El empresario Walid Makled realizó con sus empresas debidamente registradas varias operaciones, incluso la concesión de la distribución de fertilizantes producidos por Pequiven. Era dueño de un Mercal al mayor y en sus almacenadotas, ubicadas en los principales puertos del país, manejaba la mercancía de la Ford, General Motors, Chrysler e Iveco.

Makled, en declaraciones a un medio colombiano ratificadas después a El Nacional, dijo que pagaba un millón de dólares mensuales a ministros, gobernadores y altos oficiales militares del Gobierno.

Aseguró que dio dinero para el referendo a favor del presidente Chávez. "Si yo tenía la concesión de todo un puerto, el puerto más importante de todo el país eso no me lo firmó el empleado de la calle. Eso me lo firmó gente del alto gobierno. Entonces, si yo soy narcotraficante, toda esa gente que trabaja conmigo son narcotraficantes", dijo Makled.

Dayimar Ayala Altuve
Diario Tal Cual