Hay que reducir el consumo de alimentos ricos en azúcares
Una forma sencilla de disminuir las calorías en tu dieta es reduciendo la cantidad de azúcar de tus comidas y refrigerios.
Los alimentos altos en azúcares usualmente aportan muchas calorías “vacías” a tu organismo; es decir, son ricos en calorías, pero suelen ser bajos en otros nutrientes, como vitaminas, minerales y fibra.
Es más recomendable obtener la energía que necesitamos a partir de alimentos que, además de brindarnos calorías, nos proveen nutrientes esenciales.
Una buena estrategia para saber qué alimentos son altos en azúcar y evitarlos es leer las etiquetas de información nutricional. Los criterios para determinar si un alimento es alto o bajo en azúcar son los siguientes:
* Alto: Si contiene más de 15 gramos de azúcar por cada 100 gramos del producto.
* Bajo: Si contiene 5 gramos o menos de azúcar por cada 100 gramos del producto.
Ten cuidado con otros nombres que se le puede dar al azúcar en el listado de ingredientes que encontrarás en las etiquetas nutricionales. Algunos son: sacarosa, glucosa, fructosa, maltosa, azúcar invertido, dextrosa, miel, azúcar morena, jarabe de maíz.
Finalmente, sigue estos tips para disminuir la cantidad de azúcar en tu alimentación:
* Evita las bebidas gaseosas regulares; sustitúyelas por su versión light o libre de azúcar.
* Elige refrescos saborizados sin azúcar o agua en lugar de refrescos azucarados.
* Prepara tus propios jugos naturales de fruta en lugar de comprarlos enlatados.
* Diluye tus jugos de fruta con agua mineral para darles un toque “efervescente”, sin añadir calorías.
* Utiliza un edulcorante artificial para endulzar el café o el té.
* ¡Usa tu imaginación! En lugar de utilizar mermeladas o jaleas altas en azúcar, agrega frutas frescas a tus tostadas o pancakes del desayuno.
* Reduce el azúcar de tus recetas a la mitad o sustitúyela por un edulcorante artificial apto para cocinar, como la sucralosa.
* Evita las galletas rellenas de marshmallows o cremas dulces. Prefiere las galletas de tipo integral.
* Disminuye a la mitad la cantidad de azúcar que agregas a tu cereal de desayuno o, mejor aún, sustitúyela por un sobrecito de edulcorante artificial.
* Compra cereales altos en fibra y evita los cereales infantiles, que suelen ser altos en azúcar.
* Si sientes necesidad de “picar” algo dulce, mantén a la mano dulces dietéticos (sin azúcar) o gelatina light en tu refrigerador.
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